¿Sabes por qué tantas empresas no recuperan su inversión en inteligencia artificial? En los últimos meses, un concepto nuevo está poniendo nombre a un problema viejo: la sensación de que el trabajo generado por máquinas parece correcto, pero no te ayuda a avanzar. Vamos a ver qué hay detrás de esto y cómo puedes evitar caer en la trampa sin perder el impulso de la tecnología.
La cuestión no es si la inteligencia artificial sirve o no, sino cómo la usas en el día a día. Cuando el resultado obliga a rehacer tareas, corregir errores o pedir aclaraciones, el supuesto ahorro desaparece. Si lo has vivido en tu equipo, sabes que no es una anécdota y que conviene poner orden cuanto antes.
El término “workslop” nace de la investigación de BetterUp Labs junto con el Stanford Social Media Lab. Describe ese trabajo generado por inteligencia artificial que parece correcto a primera vista, pero carece de la sustancia necesaria para mover una tarea hacia delante. Es como recibir un borrador bonito que, en realidad, no te resuelve nada.
En la práctica, el “workslop” se presenta como texto pulido, informes muy formales o listas bien formateadas, pero el contenido es inútil, incompleto y sin contexto. Se cuela en proyectos porque aparenta calidad. El resultado está en dedicar tiempo a interpretar, corregir y rehacer, en lugar de entregar valor.
Si lo comparas con un buen uso de inteligencia artificial, la diferencia está en lo accionable. Un buen resultado te permite decidir, priorizar y ejecutar. El “workslop”, en cambio, desplaza el esfuerzo a quien lo recibe y multiplica fricciones en el equipo.
Un artículo de Harvard Business Review apunta que este fenómeno puede explicar por qué el 95 % de las organizaciones que han probado inteligencia artificial no ven retorno. El problema no es la herramienta por sí sola, sino el tipo de output que entra en el flujo de trabajo sin filtros ni estándares.
También te puede interesar:Errores en Textos Creados por IA Están Saliendo muy Caros a las CompañíasEl efecto más insidioso del “workslop” es el traslado de carga: quien recibe el entregable debe interpretar, corregir y rehacer. No siempre se hace visible en métricas, porque se camufla como “revisión” o “ajuste”. Esto encarece tiempos, afecta a la moral y diluye cualquier beneficio de la inteligencia artificial.
Los investigadores están llevando a cabo una encuesta continua con 1.150 empleados a tiempo completo en Estados Unidos. El dato clave preocupa: 4 de cada 10 afirman haber recibido “workslop” en el último mes. Si lo piensas, es una cadena de retrasos, dudas y reuniones que nadie había presupuestado.
En cualquier caso, esto no significa que debas frenar la inteligencia artificial. Significa que necesitas gobernarla con intención, reglas claras y buenas prácticas para cortar el “workslop” de raíz y proteger el ROI del equipo.
¿Por dónde empiezas? La investigación recomienda que los líderes modelen un uso reflexivo y con propósito de la inteligencia artificial. No basta con el ejemplo: necesitas normas explícitas y límites bien definidos sobre lo que se acepta y lo que no en cada tipo de tarea.
Cuando marcas estándares, reduces la variabilidad y mejoras la calidad del output. Con todo, conviene acompañarlo con formación breve, plantillas de prompt y revisiones ligeras. El objetivo es cortar la entrada de “workslop” y convertir la inteligencia artificial en un apoyo real, no en un generador de trabajo oculto.
Una buena plantilla evita salidas vacías. Copia y adapta este esquema para tus casos de uso. Ajústalo a tu sector y a tu cliente en línea.
También te puede interesar:Microsoft revela que hasta 30% de su código ya lo escribe la IACon una plantilla así, transforma la inteligencia artificial en un apoyo operativo real. El truco está en dar contexto, pedir acción y cortar cualquier salida vaga antes de que llegue a un cliente o a una versión de escritorio del documento final.
Estos indicadores son simples y suficientes. Si notas picos, revisa dónde se cuela la inteligencia artificial sin briefing y ajusta normas o formación.
Si te quedas con una idea, que sea esta: el “workslop” explica parte del 95 % de iniciativas de inteligencia artificial sin retorno porque parece útil, pero obliga a otros a interpretar, corregir y rehacer. Cuando modelas un uso con propósito, defines límites y exiges entregables accionables, puedes cortar el trabajo vacío y rentabilizar de verdad la inteligencia artificial en tu organización.
Me dedico al SEO y la monetización con proyectos propios desde 2019. Un friki de las nuevas tecnologías desde que tengo uso de razón.
Estoy loco por la Inteligencia Artificial y la automatización.