Una startup quiere que puedas hablar con quien ya no está. Se llama 2Wai y, desde su fase beta, promete crear avatares digitales con los que conversar en tiempo real. La idea recuerda al episodio “Be Right Back” de Black Mirror y ya corre por redes.
¿Quién está detrás y por qué ahora? 2Wai, cofundada por el actor canadiense Calum Worthy, ha impulsado el lanzamiento con vídeos en X que suman más de 40 millones de visualizaciones. La compañía asegura compatibilidad con más de 40 idiomas, lo que ha disparado su difusión global en pocos días. Hay límites técnicos y legales que conviene entender antes de probar nada.
El funcionamiento se apoya en un “HoloAvatar” que generas subiendo varios minutos de vídeo, audio y textos de la persona fallecida. Con ese material, la IA crea un avatar que simula su personalidad y responde en directo. La puesta en escena no es menor: en un clip promocional, una mujer embarazada habla por videollamada con su madre fallecida y, más tarde, el avatar lee cuentos al nieto. Con todo, falta saber qué protege a esa identidad recreada.
La propuesta toca una fibra sensible: el duelo. La promoción se dirige a quienes buscan alivio tras una pérdida y sugiere que la interacción diaria puede ayudar. Si lo comparamos con una app de mensajería, la gran diferencia es la ilusión de presencia. Aun así, los avatares digitales no traen de vuelta a nadie y pueden alargar procesos emocionales si no se usan con cuidado.

También hay casos de uso menos delicados. Con el mismo sistema, vas a poder recrear personajes históricos o ficticios y “hablar” con ellos. Es un gancho potente para educación y entretenimiento. La campaña de 2Wai se ha centrado en familiares fallecidos, y ahí empiezan los choques éticos que han inflamado el debate público.
En muchos países, la privacidad protege a los vivos y deja vacíos para los muertos, así que terceros podrían crear un avatar sin permiso familiar. Eso abre la puerta a usos malintencionados, desde engaños hasta suplantaciones emocionales. Como resume un abogado de privacidad, “las leyes de privacidad protegen a los vivos, no a los muertos”. Hay excepciones según el lugar y la fama de la persona.
Para artistas y celebridades, en lugares como California existen normas específicas sobre la explotación póstuma de imagen y voz. Es decir, recrear a una actriz fallecida sin autorización puede ser ilegal allí. Para el ciudadano medio, ese escudo rara vez existe, y por eso 2Wai ha reavivado posiciones éticas enfrentadas y un rechazo visible en varios sectores sociales.
El proceso es directo: subes fragmentos de vídeo, grabaciones de voz y textos. Con esa base, el sistema ajusta timbre, gestos y estilo conversacional. El resultado es un “HoloAvatar” que responde a tus preguntas y mantiene charlas fluidas. La verosimilitud depende de la calidad del material y del tiempo que inviertas. Unos minutos bastan para algo funcional, pero no para una personalidad compleja.
En la práctica, los avatares digitales se comportan como un chatbot con “memoria” de esa persona. Pueden contar anécdotas extraídas de tus aportes, recordar fechas si se las das y responder en tu idioma. 2Wai afirma compatibilidad con más de 40 lenguas en 2025, lo que permite que una familia hable con el mismo avatar desde países distintos. Ninguno de estos sistemas evita errores o respuestas fuera de tono.
La mayoría de leyes de privacidad actuales no regulan de forma clara los derechos de imagen y voz de los fallecidos. Eso significa que, según expertos, cualquiera podría generar un avatar sin permiso, incluso un desconocido. En cambio, la “publicity right” en estados como California protege la explotación comercial de celebridades tras su muerte. El resultado es un mapa desigual y fácil de explotar.
En este escenario, los avatares digitales pueden servir para recordar y aprender, pero también para manipular y dañar. La clave está en el contexto, el consentimiento y el propósito. Si ves que se generalizan filtros de verificación, etiquetas visibles o requerimientos de autorización familiar, prepárate para una adopción más amplia. Si no aparecen, el choque legal y social se agudizará.
Queda una idea clara: 2Wai abre una puerta que no se volverá a cerrar. Si decides probar avatares digitales para el duelo, hazlo con expectativas realistas, límites claros y atención a la letra pequeña. La tecnología promete compañía, pero la confianza depende de cómo, cuándo y para qué la usas. La conversación apenas empieza y marcará los próximos lanzamientos del sector.

Directora de operaciones en GptZone. IT, especializada en inteligencia artificial. Me apasiona el desarrollo de soluciones tecnológicas y disfruto compartiendo mi conocimiento a través de contenido educativo. Desde GptZone, mi enfoque está en ayudar a empresas y profesionales a integrar la IA en sus procesos de forma accesible y práctica, siempre buscando simplificar lo complejo para que cualquiera pueda aprovechar el potencial de la tecnología.