OpenAI y Broadcom han pactado diseñar y desplegar 10 GW de chips de IA personalizados en cuatro años. El movimiento llega tras varios acuerdos multimillonarios en septiembre y octubre de 2025, y amarra a media industria de semiconductores a la hoja de ruta de OpenAI.
La respuesta está en 2025 y Silicon Valley. El 23 de septiembre, NVIDIA anunció una inversión estratégica de hasta 100.000 millones de dólares en OpenAI. El 6 de octubre, AMD firmó un multianual por hardware equivalente a 6 GW, con opción para que OpenAI compre hasta un 10% de la propia AMD. Y en octubre, el nuevo acuerdo con Broadcom suma 10 GW codiseñados. Suena sólido, pero la trampa está en el mecanismo que lo sostiene.
Se llama financiación circular: el proveedor invierte en OpenAI y la compañía usa ese capital para comprarle chips al mismo proveedor. Ocurrió antes con Microsoft, cuyos 13.000 millones permitieron a OpenAI pagar Azure como “abono en la nube”. Así, vas a poder entender por qué todos dicen ganar hoy. OpenAI asegura cómputo y presión competitiva entre tres socios, y además participa en el diseño de su propio hardware para reducir dependencia futura de NVIDIA o AMD.
Para los proveedores, la jugada también encaja. Aseguran un cliente con demanda casi ilimitada, registran ingresos inmediatos y amortizan la inversión vendiendo más chips. NVIDIA mantiene su dominio, mientras AMD y Broadcom se expanden en IA y ven cómo el mercado premia su narrativa. El equilibrio es delicado si la demanda real no acompaña el relato.
Los números importan. Son 10 GW con Broadcom a desplegar en cuatro años, 6 GW comprometidos con AMD desde el 6 de octubre de 2025 y hasta 100.000 millones de dólares prometidos por NVIDIA desde el 23 de septiembre de 2025.
OpenAI gasta miles de millones al año y sigue sin ser rentable, pero con la financiación circular obtiene combustible para seguir creciendo y vas a poder ver iteraciones de modelos más a menudo.
También te puede interesar:OpenAI Lanza el Modo Visión en Tiempo Real y Compartir Pantalla en EuropaEn llano: el proveedor no “invierte” de forma clásica porque el dinero vuelve a su cuenta como ventas. OpenAI consigue cómputo ahora, y el proveedor asegura facturación y visibilidad. Tú, como usuario, vas a poder probar servicios más potentes en menos tiempo, pero la financiación circular concentra poder en pocas manos y empuja precios y condiciones del mercado hacia esos jugadores.
Firmar con tres proveedores da margen a OpenAI. Fomenta competencia, mejora su capacidad de negociación y, con chips a medida, recorta costes unitarios y dependencias. La contrapartida es clara: cuanto más grandes son estos acuerdos, más difícil es para nuevos actores entrar en IA o semiconductores. Anthropic o Perplexity sufren, y hasta gigantes como Google, Microsoft o Meta quedan a remolque de este ritmo de compras.
Hay un riesgo sistémico: la financiación circular puede inflar demanda artificial. El proveedor se paga a sí mismo vía OpenAI, y si la promesa de crecimiento de la IA no se cumple, el golpe afecta a toda la cadena. El paralelismo con la burbuja puntocom aparece por algo. Si OpenAI tropieza o el mercado se enfría, el efecto dominó llega a fábricas, a balances y a bolsa.
También hay un ángulo incómodo para el inversor minorista. Con acuerdos privados y poco desglose público, tú vas tarde y con menos información. Eso alimenta la sospecha de uso de información privilegiada y deja fuera a quienes no están dentro del círculo de proveedores y clientes.
Con todo, hay tres escenarios razonables. El mejor: la demanda real acompaña, el coste por token baja y los 10 GW de Broadcom llegan a tiempo, consolidando a OpenAI por encima de los grandes. El central: crecimiento sostenido pero con cuellos de botella y márgenes ajustados. El peor: desaceleración en 2026, revisiones a la baja y presión regulatoria por concentración.
Si la estrategia cuaja, OpenAI podría colocarse por encima de los gigantes actuales y empujar hacia un monopolio de facto en inteligencia artificial. Una caída brusca haría visible lo que hoy es una línea contable: la financiación circular traslada riesgo del futuro al presente. Y cuando el presente falla, las fichas caen muy deprisa.
También te puede interesar:OpenAI une fuerzas con los Laboratorios Nacionales de EEUU para transformar la investigación científicaVeremos avances rápidos gracias a acuerdos enormes, pero también un mercado más cerrado y frágil. La financiación circular sostiene el despliegue de 10 GW con Broadcom, los 6 GW con AMD y la enorme apuesta de NVIDIA, y marca el pulso del sector. El próximo hito llega en los próximos 12–18 meses: si los primeros lotes de aceleradores codiseñados entran en producción a ritmo, el plan seguirá vivo; si no, prepárate para volatilidad sostenida.
Directora de operaciones en GptZone. IT, especializada en inteligencia artificial. Me apasiona el desarrollo de soluciones tecnológicas y disfruto compartiendo mi conocimiento a través de contenido educativo. Desde GptZone, mi enfoque está en ayudar a empresas y profesionales a integrar la IA en sus procesos de forma accesible y práctica, siempre buscando simplificar lo complejo para que cualquiera pueda aprovechar el potencial de la tecnología.