La Reserva Federal puso palabras a una intuición incómoda: la inteligencia artificial ya está reordenando el mercado laboral y enfriando las contrataciones. Jerome Powell lo dijo en Washington al recortar las tasas, y la clave es clara para ti si buscas trabajo o gestionas equipos.
El presidente de la Fed situó el problema en tiempo real y con cifras, y lo vinculó a una decisión inmediata: tasas en el 3,75%–4% pese a una inflación todavía alta. Según Powell, las grandes empresas están usando la inteligencia artificial para elevar la productividad sin ampliar plantilla. La historia no termina ahí y el efecto es desigual.

El caso más visible es Amazon. La compañía, con 1,55 millones de empleados en el mundo, ha ejecutado el mayor recorte de su historia: unos 30.000 despidos corporativos, cerca del 10% de su personal de oficinas.
A la vez, se deshizo de 14.000 mandos intermedios (el 4% del personal administrativo) para quitar capas y acelerar proyectos de inteligencia artificial con inversiones multimillonarias. “La IA permite hacer más con menos gente”, resumió Powell.
No está sola. Objetivo similar en Target y Paramount, y en un número creciente de grandes compañías que han congelado contrataciones o han recortado puestos citando la inteligencia artificial de forma explícita. El recuento de Challenger, Gray & Christmas marca 946.000 despidos en lo que va de año, el nivel más alto desde 2020. Más de 17.000 se atribuyen directamente a la IA y otros 20.000 a la automatización. Los directivos ya no lo ocultan y lo comunican abiertamente.

Si ajustas las nóminas para evitar el sobreconteo estadístico, la creación de empleo está “muy cerca de cero”, dijo Powell. También apuntó a una tasa de búsqueda de empleo sorprendentemente baja entre los desempleados. Entre recién graduados, el paro supera el 5%, y muchos de la Generación Z se refugian en posgrados como pausa estratégica ante la presión de la inteligencia artificial sobre los puestos de entrada.
También te puede interesar:OpenAI Presenta un Agente para Investigación ProfundaLa paradoja es que ese frenazo convive con inversión fuerte. Powell identificó el gasto en inteligencia artificial —centros de datos y hardware especializado— como uno de los motores del crecimiento actual. A diferencia del auge de las puntocom, ahora hay beneficios reales y los megaproyectos no son apuestas vacías. Son jugadas de productividad a largo plazo que mantienen el PIB a un ritmo moderado, pero reducen la demanda de empleo.
El equilibrio macro se complica. Powell ve riesgos al alza para la inflación y riesgos a la baja para el empleo, y por eso la Fed recortó tasas hasta el 3,75%–4%. La inteligencia artificial empuja los márgenes y abarata procesos, pero desplaza tareas, sobre todo las repetitivas. Para ti, eso se traduce en menos vacantes en funciones “junior” y más presión por demostrar valor añadido humano.
Las grandes corporaciones crecen con la inteligencia artificial sin contratar al mismo ritmo, y los hogares de renta alta aguantan. En cambio, muchos consumidores con menos ingresos ya cambian a productos más baratos, señal de una economía en “K”. Quien está arriba se beneficia del salto de productividad, y quien está abajo recorta gasto.
Powell describe una economía bifurcada que complica la política monetaria. La inteligencia artificial acelera la productividad y resta calor al mercado laboral, así que cualquier movimiento de tasas tiene riesgos. La Fed navega con cautela entre mantener el empleo y contener los precios, y monitorea de cerca este desequilibrio entre inversión tecnológica masiva y contratación anémica que ya marca el eje de su discusión.
Si trabajas en un sector expuesto, vas a poder leer esta fase como una transición: automatización primero, rediseño de tareas después. La inteligencia artificial no elimina todo, pero cambia el reparto. Donde veas proyectos de IA a escala, espera más exigencia en habilidades complementarias, menos capas de gestión y procesos más “planos”. El empleo no desaparece, se transforma y se desplaza.
En conjunto, el mensaje es directo: la inteligencia artificial se consolida como motor de crecimiento y, a la vez, enfría la creación de empleo. Amazon, Target y Paramount ilustran la pauta; 946.000 despidos este año ponen el contexto; y el rango del 3,75%–4% refleja una Fed que actúa con prudencia. Si en los próximos meses ves más capex en IA y pocas vacantes nuevas, la “Gran Congelación” sigue marcando el paso.
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Directora de operaciones en GptZone. IT, especializada en inteligencia artificial. Me apasiona el desarrollo de soluciones tecnológicas y disfruto compartiendo mi conocimiento a través de contenido educativo. Desde GptZone, mi enfoque está en ayudar a empresas y profesionales a integrar la IA en sus procesos de forma accesible y práctica, siempre buscando simplificar lo complejo para que cualquiera pueda aprovechar el potencial de la tecnología.