OpenAI lanzó GPT-5 la semana pasada y el movimiento ha sacudido tu forma de usar ChatGPT. Importa porque cambia el ritmo de trabajo de millones y, sobre todo, porque revela cómo se actualiza un servicio web que ya marca tu día a día. Falta un detalle clave que explica tanto entusiasmo como nervios.
Sam Altman, CEO de OpenAI, ha reconocido que el estreno no fue limpio. ChatGPT, uno de los chatbots más usados en lo personal y en lo profesional, venía de meses de presión y crítica. El lanzamiento global de GPT-5 lo ha llevado a un nuevo pico de atención, con una consecuencia inmediata que no te esperas del todo.
Se quedaron sin GPU, lo que obliga a priorizar capacidad y a ajustar el ritmo. Al mismo tiempo, ChatGPT marcó un récord diario de usuarios tras GPT-5. Muchos aplauden el nuevo selector de modelos dentro del cliente en línea porque les da control, sin cambiar de ventana.
Altman también admite otra lección: actualizar un producto para cientos de millones de personas a la vez es más duro de lo que parece. OpenAI calculó la carga, pero el comportamiento real superó expectativas. Y aquí entra un tema delicado que quizá te suene más de redes sociales que de IA.
Hay usuarios que sienten un vínculo “parasocial” con ChatGPT. Otros simplemente esperan que el servicio web responda, valide y apoye como siempre. OpenAI ha intentado considerar ambos perfiles. Cuando cambias la forma de responder, hay fricción: tú notas matices, respuestas algo diferentes, y tu flujo de trabajo puede tambalearse unas horas.
“Nos equivocamos mucho en el lanzamiento” — Sam Altman. La cifra de “48 horas” marca la escala del salto, y el ranking público sitúa ahora a ChatGPT como el quinto sitio web más grande del mundo, un hito que no veíamos a este ritmo en IA desde 2022.
También te puede interesar:OpenAI anuncia GPT-4.5 y GPT-5: Unificación de modelos y nueva estrategiaSi usas ChatGPT para escribir correos, preparar resúmenes y resolver dudas, vas a poder seguir igual, pero con dos matices. Puede haber picos de latencia en horas punta por la escasez de GPU, y verás el selector de modelos más a mano en la versión de escritorio y en el móvil. El beneficio es claro: eliges potencia o rapidez según lo que necesites en cada momento.
Para desarrolladores con la API, el salto de demanda implica ajustes temporales, límites más estrictos y precios sensibles al coste de cómputo. Con todo, OpenAI busca estabilizar la capacidad a corto plazo. Si lo comparamos con la app móvil, el cliente en línea suele absorber mejor los picos, pero conviene plan B si tu entrega depende del tiempo de respuesta.
Altman cree que ChatGPT podría ser el tercer sitio más importante “pronto”, aunque admite que superar a Google será muy difícil. Proyecta que, en un futuro cercano, miles de millones de personas hablarán a diario con ChatGPT. El camino pasa por estabilidad técnica, tono de respuesta consistente y funciones que encajen en tu rutina sin obligarte a reaprender cada semana.
La verificación de estas afirmaciones se apoya en números compartidos por OpenAI y en rankings públicos de tráfico web conocidos por el sector. Los récords diarios desde GPT-5 y la duplicación de consumo en 48 horas encajan con ese cuadro. El matiz está en la provisión de GPU: si no llega rápido, notarás pequeñas colas en el servicio.
Centenares de millones se han acostumbrado a su forma concreta de responder. Cambiar ese “acento” de un día para otro genera críticas, pero también abre espacio para mejoras, como la elección de modelo y una guía de resultados más clara en el historial.
¿Qué mirar en las próximas semanas? Tres señales sencillas te dan la pista de hacia dónde va todo y si te afectará en el día a día.
También te puede interesar:Microsoft se prepara para el modelo GPT-5 de OpenAIEl cuadro general es nítido: ChatGPT crece como ningún otro chatbot, y GPT-5 acelera ese movimiento con costes técnicos que se notan. Has ganado control con el selector de modelos y una red más grande de usuarios, y pierdes algo de velocidad en picos por la falta de GPU.
Si OpenAI estabiliza la capacidad, ese quinto puesto global puede empujar a ChatGPT hacia el tercero, sin quitar que batir a Google siga siendo la cima más difícil.
Directora de operaciones en GptZone. IT, especializada en inteligencia artificial. Me apasiona el desarrollo de soluciones tecnológicas y disfruto compartiendo mi conocimiento a través de contenido educativo. Desde GptZone, mi enfoque está en ayudar a empresas y profesionales a integrar la IA en sus procesos de forma accesible y práctica, siempre buscando simplificar lo complejo para que cualquiera pueda aprovechar el potencial de la tecnología.