Sora es el generador de vídeo con inteligencia artificial de OpenAI que asombra por su realismo y detalle, y a la vez inquieta por su potencial de engaño. Te contamos qué pasa cuando esos clips salen de su app, por qué las etiquetas fallan y qué alternativas reales tienes para no caer en deepfakes de Sora. Lo más importante va a ser entender quién debe protegerte y cómo exigirlo.
La plataforma crea vídeos fotorealistas a partir de texto, y su versión Sora 2 ya ha mostrado escenas que parecen sacadas de una cámara real. Ya hay deepfakes de Sora con figuras como Martin Luther King Jr., Michael Jackson o Bryan Cranston, e incluso personajes con copyright como Bob Esponja y Pikachu.

Algunos usuarios subieron su cara a la herramienta y vieron su imagen usada para gritar insultos racistas o circular en cuentas con fetiches. Dentro de la app hay cierto consenso: el contenido no es real. El problema llega cuando esos vídeos salen a redes, porque desaparecen avisos y se difumina cualquier etiqueta de IA que indique el origen.
Sora 2 ya se usa para clips de falsas alarmas de bomba, niños en zonas de guerra y escenas con violencia o racismo muy explícitas. Un ejemplo analizado por The Guardian mostró a un manifestante negro gritando “you will not replace us” a partir del prompt “Charlottesville rally”, una combinación de deepfake de Sora y contexto sensible que confunde a cualquiera.
Content Credentials (C2PA) es un estándar abierto impulsado por la Content Authenticity Initiative de Adobe y una coalición de empresas, incluida OpenAI, para adjuntar metadatos verificables a fotos, vídeos y audio. En teoría, permitirá saber cómo, cuándo y con qué se creó cada pieza, y así reconocer deepfakes de Sora.
OpenAI forma parte del comité de dirección de la C2PA y, de hecho, cada vídeo generado con Sora incluye esa credencial. La información es casi invisible para ti. Para que funcione de verdad, debe adoptarse en todas las fases, ser legible y mostrarse en claro a quien ve el clip.
También te puede interesar:Nos Hablan de IA General, Pero lo que Buscan con Veo 3 y Sora 2 es Monetizar tu AtenciónGrandes actores como Adobe, OpenAI, Google, YouTube, Meta, TikTok, Amazon o Cloudflare dicen apoyar C2PA, incluso algunos organismos públicos. Con todo, la mayoría no lo usa para etiquetar de forma clara los deepfakes de Sora que ves a diario. En redes, las marcas visibles son escasas, se pierden fácil y casi nunca explican nada.
En realidad, muchos vídeos llegan sin etiquetas porque quien sube el archivo puede borrar metadatos o no declarar el origen, y la plataforma no detecta el fraude. Meta cambió su sello “Made by AI” a “AI Info” tras quejas de fotógrafos etiquetados por editar en Photoshop, un síntoma de sistemas poco finos. X, por su parte, confía en reportes de usuarios y notas de la comunidad, y se apartó de la iniciativa CAI tras la compra de Elon Musk.
OpenAI y Meta impulsan ecosistemas enteros de vídeos generados por IA que luego circulan en redes, acelerando la exposición a deepfakes de Sora. TikTok, Amazon y Google evitaron aportar detalles sobre C2PA, mientras Meta dice que sigue implementándolo y revisa su estrategia de etiquetado. OpenAI ofrece poca información práctica y te remite a posts y ayudas muy breves.
Un clip que aparenta ser de Sora, con una supuesta cámara de seguridad donde un hombre salva a un bebé, sumó casi dos millones de reproducciones en TikTok. No llevaba ningún aviso de IA, y la gente discutía si era real o no. Esto ilustra cómo un deepfake de Sora puede parecer legítimo cuando las etiquetas no existen o no se ven.
Hoy, la carga recae en el usuario que quiera comprobar un archivo. No es ideal, pero te dejamos un camino corto para detectar deepfakes de Sora con C2PA:
Este proceso es engorroso y poco accesible. Otros sistemas, como SynthID de Google, añaden marcas de agua invisibles, pero para ti no es más sencillo. Si lo comparamos con una etiqueta clara en pantalla, todo esto resulta demasiado complicado para frenar deepfakes de Sora en el uso diario.
También te puede interesar:Sora 2, el Nuevo Generador de Videos de OpenAI, Promete un Mundo Donde Nada Será RealOpenAI añade marcas de agua en los vídeos, pero se quitan con facilidad y no sobreviven a recortes o recomprasión. Los metadatos también se borran sin esfuerzo, y plataformas como redes sociales los eliminan de forma habitual, tal como reconoce el investigador de Adobe, Collomosse. Así, el rastro se pierde y el deepfake de Sora queda “limpio”.
Content Credentials intenta responder con huellas digitales que identifiquen obras incluso si cambian metadatos. Toda medida técnica puede romperse. Reality Defender demostró que pudo saltarse las barreras de identidad de Sora 2 en menos de 24 horas tras su lanzamiento, generando deepfakes de celebridades una y otra vez.
Frente a marcas de agua o metadatos, surgen sistemas de inferencia como Reality Defender que analizan señales sintéticas sutiles para estimar si un vídeo ha sido generado o manipulado. No dan certezas del 100 %, pero mejoran rápido y no necesitan leer etiquetas para cazar deepfakes de Sora.
Ben Colman, CEO de Reality Defender, lo resume bien: la responsabilidad no debería caer en ti, sino en las plataformas y sus equipos de confianza y seguridad. C2PA es útil, pero insuficiente como solución única, y debe combinarse con estos clasificadores para reducir la exposición a deepfakes de Sora a escala.
Andy Parsons, directo de Content Authenticity en Adobe, asegura que la adopción de Content Credentials avanza, aunque falta visibilidad para el usuario final. Tras cuatro años de trabajo de C2PA y CAI, los progresos permanecen casi invisibles para la mayoría, y tú apenas ves sellos claros cuando circulan deepfakes de Sora.
El sistema, basado en la “buena fe” de quienes crean, editan y publican, no está funcionando en la práctica. Aquí aparece la paradoja: OpenAI participa en el estándar, pero la protección real contra abusos y deepfakes de Sora se queda corta. Hay quien lo ve más como una maniobra de comunicación que como un compromiso efectivo.
Los vídeos de Sora llevan Content Credentials incrustados, pero tú no ves ningún indicio en pantalla. Cuando alguien los sube a Instagram, TikTok o YouTube, no aparecen etiquetas de procedencia con claridad, ni siquiera al hacerse virales. Con todo, muchos servicios podrían escanear esos metadatos, aunque hoy casi nunca lo hacen.
Adobe apoya cambios normativos como el FAIR Act (2023) para crear un derecho federal anti-impersonación, y la Preventing Abuse of Digital Replicas Act (PADRA) de 2024. Iniciativas cercanas, como la “No Fakes Act”, cuentan con respaldo de plataformas como YouTube para proteger frente a imitaciones por IA y deepfakes de Sora.
Colman apunta a un diálogo avanzado entre tecnológicas y legisladores en Estados Unidos para leyes proactivas, ya que dejar todo en la autorregulación no ha bastado. El propio Parsons admite que confiar solo en metadatos seguros o marcas invisibles no frenará la desinformación, y que la experiencia de usuario con avisos sobre deepfakes de Sora puede empeorar antes de mejorar en uno o dos años.
| Método | Cómo funciona | Puntos fuertes | Limitaciones | Uso recomendado |
|---|---|---|---|---|
| C2PA / Content Credentials | Metadatos verificables y huella de procedencia | Atribuye autoría y ediciones con fiabilidad | Metadatos se borran y apenas se muestran | Rastreo de origen y disputas de autoría |
| Marcas de agua invisibles (p. ej., SynthID) | Señales embebidas en el contenido | No depende de metadatos | Fácil de degradar con edición o recomprasión | Apoyo a políticas internas de plataformas |
| Inferencia (p. ej., Reality Defender) | Clasificación por señales sintéticas | No requiere etiqueta previa | No ofrece certeza absoluta | Filtrado a escala de deepfakes de Sora |
Antes de compartir, pausa unos segundos y pregúntate: ¿quién lo publicó primero y con qué contexto? Busca inconsistencias de luz, manos, textos o sombras, porque aún delatan deepfakes de Sora. Con todo, verifica la fecha, compara en varias fuentes y revisa comentarios de cuentas especializadas.
Cuando puedas, descarga el archivo y pasa un chequeo de C2PA o un detector por inferencia. Si el tema es sensible —protestas, violencia o figuras públicas—, sé doblemente cuidadoso. Exigir etiquetas visibles a las plataformas es la única vía para que no recaiga todo en ti frente a los deepfakes de Sora.
Las redes deben escanear metadatos de Content Credentials automáticamente y mostrar una etiqueta clara, legible y con contexto. También conviene combinarlo con detectores por inferencia y un sistema de revisión interna para casos dudosos, reduciendo la circulación de deepfakes de Sora antes de que se hagan virales.
Hace falta adopción de extremo a extremo: desde quien crea hasta quien publica, sin huecos donde se pierdan marcas o metadatos. Con todo, la autorregulación no basta. Políticas públicas y sanciones por ocultar procedencia pueden alinear incentivos y protegerte de verdad frente a deepfakes de Sora.
Hoy, Sora muestra un poder técnico enorme y, a la vez, destapa las costuras de C2PA, de las etiquetas en redes y del modelo de “buena fe”. Mientras los metadatos sigan ocultos, las marcas sean frágiles y la detección no recaiga en las plataformas, sigues expuesto a deepfakes de Sora. Exige señales visibles, pide verificaciones automáticas y combina Content Credentials con detectores por inferencia para navegar con cabeza en un feed donde la IA ya juega en serio.

Directora de operaciones en GptZone. IT, especializada en inteligencia artificial. Me apasiona el desarrollo de soluciones tecnológicas y disfruto compartiendo mi conocimiento a través de contenido educativo. Desde GptZone, mi enfoque está en ayudar a empresas y profesionales a integrar la IA en sus procesos de forma accesible y práctica, siempre buscando simplificar lo complejo para que cualquiera pueda aprovechar el potencial de la tecnología.