En un mercado cada vez más competitivo, Amazon ha puesto la mira en la tecnología vestible basada en inteligencia artificial (IA) para reforzar su posición. La compañía está cerca de adquirir Bee, una startup que ha desarrollado un brazalete inteligente capaz de grabar automáticamente lo que dice su usuario y generar recordatorios personalizados, replicando una función que parece casi “mágica” por su precisión y utilidad.
Bee ha desarrollado un asistente virtual que registra las conversaciones del usuario para elaborar recordatorios y listas, funcionando a través de un brazalete que cuesta 40,99 dólares, acompañado de una suscripción mensual de 19 dólares.
La startup recaudó 7.000 millones de dólares en una ronda de financiación liderada por Exor, lo que refleja la confianza de inversionistas en esta propuesta.
Aunque aún no se ha cerrado el acuerdo, Amazon ha ofrecido a varios empleados de Bee unirse a su plantilla, en línea con la estrategia común de las grandes tecnológicas de absorber startups prometedoras para integrar sus tecnologías y talento.
Además, la integración con Amazon permitiría a Bee desarrollar una nube móvil (“cloud phone”) que daría acceso directo a las cuentas y notificaciones de los usuarios, aumentando la efectividad del asistente personal.
La apuesta de Amazon se produce en un contexto donde otras grandes empresas también fortalecen su presencia en wearables. Meta, por ejemplo, lanzó unas gafas inteligentes en colaboración con Oakley que incorporan IA, con un enfoque distinto al de Bee pero igualmente orientado a la experiencia del usuario.
También te puede interesar:Amazon lanza guías de compra impulsadas por IA para mejorar la experiencia del usuarioSin embargo, la función de grabación automática del brazalete de Bee solo puede desactivarse manualmente, lo que genera inquietudes sobre la privacidad y el control del usuario sobre sus datos. Organismos y expertos en ética tecnológica insisten en la necesidad de marcos regulatorios claros para proteger a usuarios frente al uso masivo de datos personales en el entrenamiento de modelos de IA.
En este debate, mientras algunos líderes como el CEO de Anthropic demandan una regulación estricta, otros, incluidos exmandatarios como Donald Trump y algunos actores influyentes de Silicon Valley, abogan por una desregulación que favorezca la innovación, pero que podría dejar vulnerables a los usuarios.
La incursión de Amazon en los wearables con IA refleja una tendencia clara hacia dispositivos que facilitan la gestión personal a través del análisis de datos continuos. Aunque el brazalete de Bee promete una experiencia práctica y económica, el desafío principal sigue siendo garantizar la transparencia, seguridad y ética en el manejo de información sensible.
Queda por ver cómo Amazon y el sector tecnológico abordarán estos retos mientras continúan impulsando la innovación en dispositivos inteligentes que cada vez están más integrados en nuestra vida diaria.
También te puede interesar:Amazon se centra en la IA con un plan para invertir $100 mil millones para 2025Me dedico al SEO y la monetización con proyectos propios desde 2019. Un friki de las nuevas tecnologías desde que tengo uso de razón.
Estoy loco por la Inteligencia Artificial y la automatización.