Imagínate pedir un hotel que admita mascotas, reservar un fontanero para mañana por la tarde y cerrar cita en tu peluquería favorita solo hablando con tu altavoz inteligente. Con Alexa+ Amazon quiere justo eso: que puedas tratar el asistente de voz como si fuera tu nueva “tienda de apps” conversacional. La idea es que no tengas que ir saltando entre webs y aplicaciones, sino resolverlo todo con una frase.
Con las nuevas integraciones que llegarán a partir de 2026, este plan se acelera. Vas a poder reservar hoteles, pedir presupuestos de servicios para el hogar o encontrar un salón de belleza cerca de casa usando solo tu voz y un diálogo natural con la IA de Alexa+. La clave está en cómo combina las apps clásicas con una conversación flexible, en la que afinas la petición paso a paso hasta conseguir justo lo que necesitas.
A partir de 2026, Amazon va a ampliar la IA de Alexa+ con cuatro integraciones clave: Expedia, Angi, Square y Yelp. Cada una abre una puerta distinta a servicios online que sueles hacer desde el móvil o el ordenador, pero ahora pasas a gestionarlos mediante voz y conversación.

Con todo, estas cuatro no llegan solas. Se suman a otras integraciones ya activas, como Fodor, OpenTable, Suno, Ticketmaster, Thumbtack y Uber, que refuerzan la idea de Alexa+ como plataforma de servicios. Poco a poco, el asistente se va llenando de opciones para que puedas buscar viajes, ocio, transporte y servicios domésticos desde un único punto de entrada: la conversación.
La integración de Alexa+ con Expedia convierte al asistente en una especie de “agente de viajes” conversacional. Vas a poder comparar hoteles, reservarlos y gestionar tus reservas directamente hablando con Alexa, sin abrir la app clásica de Expedia ni entrar en la web.
Lo interesante es que puedes expresar tus preferencias de viaje con tus propias palabras. Puedes decirle a Alexa+ que buscas hoteles tranquilos, con buen Wi‑Fi, cerca del centro o con desayuno incluido, y el sistema trasladará esas condiciones a Expedia para ofrecerte recomendaciones personalizadas. Cuanto mejor expliques lo que quieres, más ajustadas serán las sugerencias.
También te puede interesar:Alexa+ Llega a la App de Amazon Music: Integración de IA y Funciones DestacadasImagina que quieres hacer una escapada de fin de semana con tu perro. En lugar de filtrar a mano en una web, puedes decirle a la IA de Alexa+: “Alexa, busca hoteles que admitan mascotas en Chicago para el próximo fin de semana”. El asistente se apoyará en Expedia para encontrar opciones que cumplan justo esa condición.
Si alguna propuesta no te convence, sigues el diálogo. Le pides que solo te enseñe hoteles con cancelación gratuita, que estén cerca del centro o que tengan parking propio. Ese ida y vuelta te evita repetir toda la búsqueda y te permite cerrar la reserva con un simple “reserva este hotel”. Todo el proceso se mantiene dentro de Alexa+.
La integración de Alexa+ con Angi apunta al mundo de los servicios para el hogar. Aquí entran perfiles como fontaneros, pintores, electricistas o empresas de limpieza que normalmente buscarías en Google o en una app dedicada, comparando valoraciones y presupuestos.
Con Angi dentro de la IA de Alexa+, vas a poder pedir presupuestos explicando el problema con tu voz: una fuga en la cocina, una instalación eléctrica antigua o una reforma parcial. El asistente te irá pidiendo detalles, como tipo de vivienda, zona o fecha, y conectará con la plataforma para mostrarte opciones relevantes sin que tengas que navegar por menús complejos.
Square se centra en los cobros y en la gestión de negocios pequeños, sobre todo tiendas, bares, peluquerías o centros de estética. Al integrarse con Alexa+, estos comercios van a poder ofrecer experiencias de reserva y quizá de pago más directas a través de la voz.
La parte de pagos dependerá mucho de cómo configure cada negocio su sistema. Lo claro es que, con la IA de Alexa+, vas a poder pedir una cita o confirmar un servicio en un comercio que trabaje con Square sin tener que llamar por teléfono ni andar revisando horarios en una web poco clara.
La integración de Alexa+ con Yelp se centra en la búsqueda de locales: restaurantes, bares, tiendas, salones de belleza y más. En vez de teclear y filtrar por barrio, tipo de comida o precio, puedes explicarle a Alexa+ qué tipo de sitio buscas y en qué zona.
Puedes pedir, por ejemplo, un salón de belleza cerca de tu casa, con buenas reseñas y precio medio, para mañana por la tarde. La IA de Alexa+ usará los datos de Yelp para sugerirte sitios encajados con esa petición y, en muchos casos, ayudarte a concertar la cita sin salir del asistente ni llamar al local.
Más allá de Expedia, Angi, Square y Yelp, Amazon ya ha conectado la IA de Alexa+ con otras aplicaciones conocidas. Entre ellas están Fodor para guías de viaje, OpenTable para reservas en restaurantes, Suno para generación musical, Ticketmaster para entradas de eventos y Thumbtack para más servicios a domicilio.

Con todo este ecosistema, Alexa+ se quiere convertir en una especie de centro de mando de tu vida digital. En lugar de abrir una app para cada cosa, hablas con el asistente, este decide qué servicio encaja mejor con tu petición y realiza las acciones por ti, como si fuera una capa por encima de todas esas plataformas.
Una de las funciones más directas es la posibilidad de pedir un Uber con Alexa+. En vez de abrir la app, buscar la dirección y confirmar, le dices al asistente algo tan básico como “Alexa, pide un Uber para ir al trabajo” y el sistema se ocupa del resto apoyándose en la integración con Uber.
Si quieres más control, puedes afinar: eliges tipo de vehículo, hora aproximada o punto exacto de recogida. Gracias a la conversación de ida y vuelta, la IA de Alexa+ puede preguntarte si prefieres salir ahora o dentro de 20 minutos, o si quieres que use la dirección de casa o tu última ubicación.
Con OpenTable conectado a Alexa+, reservar restaurante pasa a ser casi un diálogo informal. Pides, por ejemplo, “busca un sitio para cenar japonés mañana sobre las nueve para cuatro personas” y el asistente consulta la disponibilidad a través de OpenTable, mostrándote alternativas compatibles con esa franja horaria.
Si no hay mesa a las nueve, la IA de Alexa+ puede proponerte las ocho y media o las nueve y media. Tú solo tienes que aceptar una de las opciones, y la reserva queda hecha dentro del sistema de OpenTable, sin que tengas que rellenar formularios ni comprobar horarios manualmente.
Los proveedores de servicios personales y a domicilio son otro punto fuerte del modelo. Empresas y profesionales que usan plataformas como Thumbtack o Vagaro ya están viendo, según Amazon, un nivel de interacción “fuerte” por parte de los primeros usuarios de Alexa+. Eso indica que pedir un servicio por voz puede encajar muy bien en este tipo de necesidades diarias.
Con la IA de Alexa+ vas a poder, por ejemplo, buscar un entrenador personal, un fisio o un servicio de limpieza, describiendo lo que necesitas, tu zona y tus horarios. El asistente aprovecha las integraciones para mostrarte opciones, horarios disponibles y, en algunos casos, cerrar la reserva o poner en contacto directamente a ambas partes desde la misma conversación.
El movimiento de Amazon con Alexa+ encaja en una tendencia clara: convertir los asistentes de IA en plataformas de apps. En lugar de que tú busques qué aplicación abrir, el asistente entiende tu intención y decide con qué servicio debe trabajar, un poco al estilo del modelo que está siguiendo ChatGPT con sus propias integraciones.

Este enfoque quiere llevar la IA de Alexa+ al centro de tu relación con los servicios digitales. Pides un viaje, un coche, una mesa o un profesional, y el asistente coordina todo “por detrás” con Expedia, Uber, OpenTable u otras plataformas. El reto está en que te resulte tan natural que no eches de menos el modelo clásico de buscar iconos y navegar por pantallas.
Hasta ahora, lo normal era entrar en una web o abrir una app móvil y gestionar cada servicio por separado. Con Alexa+ cambias el chip: pasas a describir lo que quieres mediante voz o texto y la IA de Alexa+ se encarga de traducir esa intención a acciones concretas en las plataformas integradas.
Este cambio solo tendrá éxito si la experiencia te resulta al menos igual de fácil que el sistema actual, o incluso más directa. Si con dos o tres frases consigues lo mismo que antes te llevaba varios minutos de menús, filtros y botones, verás valor en la propuesta. Si el asistente complica el proceso o falla demasiado, volverás a las apps clásicas sin pestañear.
Para que los usuarios adopten de verdad la IA de Alexa+ como forma principal de acceder a servicios online, Amazon y el resto de proveedores de IA tendrán que cumplir varias condiciones. No basta con tener integraciones atractivas; la experiencia global debe sentirse fluida, clara y, sobre todo, más cómoda que lo que ya conoces.
Uno de los puntos clave es la amplitud de servicios disponibles. Si Alexa+ solo te ofrece unas pocas opciones, seguirás necesitando la tienda de aplicaciones tradicional o el navegador para cubrir el resto de necesidades. El objetivo es que el número y variedad de servicios dentro del asistente se acerque, como mínimo, a lo que encuentras en una app store actual.
Las tiendas de aplicaciones como las de iOS o Android ya son una especie de selección filtrada de todo lo que hay en la web, pero aun así cubren casi cualquier categoría que te puedas imaginar. Para competir con ese modelo, los asistentes de IA como Alexa+ necesitan ofrecer una diversidad de servicios similar o al menos suficiente para que no tengas que salirte del asistente cada dos por tres.
En la práctica, esto significa integrar muchas más plataformas, desde banca hasta salud, pasando por educación, ocio y compras. Si la IA de Alexa+ solo sirve para viajes y servicios domésticos, se quedará en un complemento. En cambio, si vas viendo que el 80% de tus gestiones cotidianas se resuelven desde la misma conversación, el asistente pasará a ser una pieza central en tu rutina digital.
Otro componente delicado es cómo el asistente sugiere qué app o servicio usar en cada contexto. Idealmente, la IA de Alexa+ detecta tu necesidad, propone la plataforma adecuada en el momento justo y se mantiene en un segundo plano, sin interrumpir cuando no toca ni repetir sugerencias que no te interesan.
Si las recomendaciones se vuelven pesadas, demasiado insistentes o parecen anuncios camuflados, muchos usuarios lo interpretarán como publicidad no deseada. En ese escenario, la confianza se resiente y volverás a buscar por tu cuenta. Por eso, el equilibrio entre ayuda útil y respeto a tu atención será uno de los factores que decidan el éxito o el fracaso de este modelo conversacional.
En conjunto, la apuesta de Amazon con la IA de Alexa+ apunta a transformar la forma en que te relacionas con los servicios online: menos iconos y menús, más conversación natural y delegación en un asistente que conecta con Expedia, Angi, Square, Yelp y muchas otras plataformas. Si consigue ser tan sencillo como hablar, tan completo como una tienda de apps y lo bastante respetuoso para no saturarte con recomendaciones, este modelo de asistente de IA conversacional puede convertirse en tu puerta principal a la web de servicios del día a día.
Me dedico al SEO y la monetización con proyectos propios desde 2019. Un friki de las nuevas tecnologías desde que tengo uso de razón.
Estoy loco por la Inteligencia Artificial y la automatización.