Google ha movido ficha en España con una novedad que cambia la forma de buscar en internet. Hablamos del Modo IA de Google, una experiencia que te deja escribir o hablar como lo harías con otra persona y recibir respuestas desarrolladas al instante. Vas a poder plantear dudas complejas, seguir la conversación y, si quieres, profundizar paso a paso sin perder el hilo.
La novedad llega como un botón opcional dentro del propio buscador y en las apps de Android y iOS. Con todo, no aparece todavía para todo el mundo, se activará de forma progresiva y es gratuito. Si lo comparas con la búsqueda clásica, notarás el salto: menos lista de enlaces y más respuesta directa, con contexto y ejemplos reales.
El Modo IA de Google es un modo de búsqueda conversacional que te entiende en lenguaje natural y te devuelve respuestas completas. La idea es clara: cuando la pregunta no tiene una única solución, la IA te orienta, resume varias fuentes y te propone opciones con detalle. Puedes seguir abriendo las páginas de origen y ampliar por tu cuenta.
Su llegada a España forma parte de un despliegue global que añade 36 idiomas, entre ellos el español, y cerca de 50 países nuevos hasta superar los 200 en total. La experiencia llega directamente a la página principal del buscador, lo que traslada capacidades de Gemini, el motor de IA de Google, a la web que usas cada día.
La búsqueda clásica te ofrece una lista de enlaces ordenados por relevancia. En cambio, el Modo IA de Google genera una respuesta desarrollada, con párrafos explicativos y ejemplos que resuelven la consulta de forma directa. Con todo, cada bloque incluye botones que te llevan a las webs citadas, para que contrastes y amplíes la información original.
En pruebas iniciales en Estados Unidos, los usuarios formularon consultas dos o tres veces más largas de lo habitual. Esa longitud extra permite preguntas exploratorias, como “qué método de café encaja en mi cocina pequeña”, y la IA mantiene el contexto para seguir conversando y ajustar la respuesta a lo que realmente necesitas.
Vas a ver un botón específico del Modo IA de Google en la página de resultados y en las aplicaciones móviles. Su activación es opcional y, por ahora, solo quienes lo pulsen acceden a esta experiencia. El despliegue es progresivo, por lo que puede que todavía no te aparezca y debas esperar unos días.
Cuando el botón esté disponible en tu cuenta, verás la respuesta de la IA sobre la búsqueda habitual. Desde ahí, puedes continuar con preguntas de seguimiento, cambiar el enfoque y pedir ejemplos o comparativas, todo sin empezar desde cero cada vez.
¿Quieres practicar desde el primer minuto? Con el Modo IA de Google vas a poder consultar por texto, voz o imagen, mantener una charla con el buscador y pedir más precisión en cada vuelta. La experiencia está pensada para dudas abiertas, en las que no existe un único enlace que lo resuelva todo.
El Modo IA de Google brilla en preguntas como “ideas para planificar una ruta por Asturias con lluvia” o “cómo elegir un portátil silencioso para estudiar”. La IA conserva el contexto y entiende que cada nueva pregunta se apoya en lo anterior. Puedes reconducir la charla con “quita opciones caras” o “filtra por tamaño”, y la IA ajusta la respuesta al instante.
Esta experiencia recuerda a herramientas como ChatGPT o buscadores específicos de IA como Perplexity. El objetivo es claro: mantener a Google como referencia cuando buscas, incluso si ahora quieres conversar con el buscador y no solo ver enlaces sueltos.
Imagina que preguntas “métodos para preparar café en casa”. El Modo IA de Google puede devolver una comparativa y, en la misma conversación, te permite afinar con “¿qué grosor de molido conviene para cada método?”. A continuación, verías algo parecido a esto:
Método | Molido recomendado | Tiempo aproximado |
---|---|---|
Prensa francesa | Grueso | 4–5 minutos |
Filtro (V60/Chemex) | Medio | 2–4 minutos |
Espresso | Fino | 25–30 segundos |
Moka | Medio-fino | 2–3 minutos |
Después, vas a poder pedir más: “ajusta para café descafeinado”, “propón recetas frías” o “sustituye por métodos sin papel”. La IA mantiene el contexto y te guía con pasos claros y enlaces a las páginas de referencia al final de cada párrafo.
Para ofrecer respuestas precisas, el Modo IA de Google aplica una técnica de descomposición: divide tu pregunta en subtemas, lanza búsquedas múltiples y reúne la información más relevante. Ese enfoque permite llegar a contenido más especializado que lo que obtendrías con una única consulta tradicional.
Gemini, el modelo de IA de Google, coordina este proceso y sintetiza resultados con un nivel de detalle alto. Con todo, la compañía admite que está en fase inicial y puede fallar en algunos casos, por lo que recomiendan contrastar fuentes y enviar feedback para mejorar el sistema.
En cada respuesta del Modo IA de Google, verás botones al final de los párrafos que abren las páginas usadas como fuente. Ese diseño busca transparencia y te anima a comprobar detalles clave, cifras o pasos críticos. Si la IA te resuelve la duda por completo, es lógico que decidas no abrir los enlaces adicionales.
Durante las pruebas previas, el sistema demostró rapidez para rastrear la web “al vuelo”, con resultados ricos en matices. Vas a poder aprovechar resúmenes, comparativas y listas de pros y contras, y luego saltar a los sitios originales cuando necesites ampliar o verificar métodos y cifras concretas.
El Modo IA de Google es multimodal: acepta texto, voz e imágenes. Puedes sacar una foto al menú de un restaurante y preguntar por un plato raro, o dictar una consulta larga con el micrófono cuando vas en el metro. La IA analiza el contenido visual y la consulta hablada para darte una respuesta con contexto.
También vas a poder subir capturas de pantalla y pedir “resúmeme este documento” o “explica esta gráfica como si tuviera 12 años”. En cualquier caso, el objetivo es que no te frenes por el formato: si puedes mostrarlo o contarlo, la IA lo entiende y te responde.
El despliegue global del Modo IA de Google suma 36 idiomas nuevos, incluido el español, y cerca de 50 países y territorios. Con todo, la activación llegará por oleadas y en España puede tardar unos días en aparecer en tu cuenta. El servicio es gratuito y no requiere ajustes avanzados: solo pulsa el botón cuando lo veas.
La llegada a Europa tiene un matiz importante por la regulación más estricta en inteligencia artificial respecto a Estados Unidos. Google afirma que seguirá mejorando la experiencia con el uso real y el feedback, adaptando el modo a las normas locales y a las expectativas de los usuarios europeos.
Si todavía no ves el botón del Modo IA de Google, espera unos días y mantén la app actualizada. También puedes probar desde otro dispositivo o navegador. Recuerda que la activación es progresiva, así que puede llegar a tus búsquedas más tarde que a las de tus amigos o compañeros.
La cara B del Modo IA de Google está en su impacto en los medios. En países donde ya funciona, muchos sitios han detectado caídas de tráfico de entre el 20% y el 60%. La tendencia se aprecia también allí donde Google mostró resúmenes con IA dentro de los resultados, incluso antes del despliegue completo.
El motivo es sencillo: si recibes una respuesta directa y completa, tienes menos razones para visitar la página que sirvió como fuente. Google sostiene que los clics que sí se producen desde el modo IA son de mayor calidad, porque pasas más tiempo leyendo cuando haces clic, pero eso no compensa la pérdida de volumen.
A día de hoy, Google no ha anunciado un mecanismo de compensación para las páginas utilizadas como fuente en el Modo IA de Google. Los editores señalan que el descenso de visitas afecta a sus ingresos y reclaman medidas. Con todo, la compañía reconoce que la tecnología está en una fase temprana y promete seguir ajustándola.
Durante la prueba inicial lanzada en marzo ya se notaron efectos en el tráfico web, y se espera evaluar el impacto real tras el despliegue global. La dirección parece clara: este movimiento puede marcar un cambio definitivo en cómo buscamos y cómo distribuimos la atención entre buscador y medios.
La tesis de Google es que el Modo IA de Google no elimina los clics, los concentra. Es decir, llega menos gente, pero la que entra está realmente interesada. Para muchos medios, esta mejora cualitativa no compensa la caída en volumen. El reto será encontrar equilibrio entre respuestas útiles dentro del buscador y derivación suficiente hacia las fuentes.
Para ti, como usuario, la clave está en no quedarte solo con el resumen cuando el tema lo merece. Para dudas rápidas o comparativas iniciales, la IA es extremadamente sencilla y te ahorra tiempo en consultas largas y de contexto difuso.
En los próximos meses, vas a ver el Modo IA de Google más visible y afinado. Se espera que mejore con las consultas reales, que ajuste mejor los matices y que reduzca errores. También veremos debates regulatorios en Europa y posibles cambios en cómo se muestran las fuentes y cómo se reparte el tráfico.
Como usuario, el consejo es probarlo y combinarlo con la búsqueda clásica. Usa la IA para explorar y entender el panorama, y abre enlaces cuando necesites profundidad, datos originales o contexto adicional, especialmente en temas sensibles o con impacto práctico.
Para aprovechar el Modo IA de Google, formula preguntas largas y claras, incluye condiciones (“barato”, “sin gluten”, “para principiantes”) y pide ejemplos. Cuando la respuesta te parezca razonable, abre al menos una de las fuentes para verificar cifras y procedimientos. Si se trata de una duda cotidiana, el resumen puede ser suficiente.
Prueba su multimodalidad: sube una imagen del problema, dicta tu consulta cuando tengas prisa y usa el seguimiento para afinar. En cualquier caso, recuerda que la IA puede equivocarse, así que contrasta datos críticos y usa los botones de las fuentes al final de los párrafos para profundizar cuando haga falta.
El Modo IA de Google ya está aterrizando en España con Gemini y una propuesta clara: ayudarte a explorar temas complejos con respuestas directas, multimodales y con contexto. Vas a poder conversar con el buscador, comprobar fuentes y decidir cuándo abrir enlaces. Su impacto en los medios abre un debate que seguirá vivo mientras la IA redefine cómo buscamos información en la web.
Me dedico al SEO y la monetización con proyectos propios desde 2019. Un friki de las nuevas tecnologías desde que tengo uso de razón.
Estoy loco por la Inteligencia Artificial y la automatización.