OpenAI, uno de los actores más influyentes en el desarrollo de inteligencia artificial general (AGI), ha revertido su decisión de desprenderse del control de su junta sin fines de lucro, luego de una ola de críticas y el escrutinio de autoridades regulatorias.
La empresa, fundada como una organización sin fines de lucro en 2015, había planteado una transformación estructural hacia un modelo totalmente for-profit, lo que provocó reacciones adversas de figuras clave del ecosistema tecnológico, entre ellas Elon Musk, así como de académicos, organizaciones civiles y fiscales estatales.
En lugar de continuar con su transición hacia una corporación de lucro convencional, OpenAI convertirá su brazo comercial en una Public Benefit Corporation (PBC) —una figura legal utilizada por empresas como Anthropic, xAI y Patagonia— que permite operar con fines de lucro, pero bajo una misión de beneficio público.
Según informó el presidente de la junta, Bret Taylor, la decisión responde a conversaciones con líderes cívicos y a diálogos con las oficinas de los fiscales generales de California y Delaware, quienes tenían autoridad para bloquear la conversión propuesta.
“OpenAI fue fundada como una organización sin fines de lucro, es supervisada hoy por esa misma entidad, y así seguirá siendo”, afirmó Taylor en el blog oficial de la compañía.
La modificación más significativa es el abandono del modelo de ganancias limitadas (“capped-profit”) que permitía a los inversionistas multiplicar su inversión hasta 100 veces, después de lo cual las ganancias futuras se destinaban a la organización sin fines de lucro.
También te puede interesar:OpenAI recauda $6.6 mil millones y alcanza una valoración de $157 mil millonesCon el nuevo esquema, los inversionistas y empleados tendrán acciones comunes sin límites de rentabilidad, con el objetivo de facilitar futuras rondas de financiamiento. Según declaraciones del vocero de OpenAI, Steve Sharpe, esta flexibilización fue una condición clave para asegurar las últimas rondas de inversión millonarias.
A cambio, la organización sin fines de lucro de OpenAI mantendrá una participación relevante en la nueva PBC, cuya valoración se espera que crezca con el tiempo. Aunque todavía se desconoce el porcentaje exacto de esa participación, se prevé que dicha estructura genere recursos adicionales para iniciativas públicas en salud, educación y ciencia, alineadas con la misión original de la organización.
Además, OpenAI anunció la creación de una Comisión de Asesores de la organización sin fines de lucro, que orientará los esfuerzos para asegurar que la inteligencia artificial beneficie a una amplia gama de comunidades.
El intento de OpenAI por convertirse en una entidad con fines de lucro generó una avalancha de críticas. El propio Elon Musk, cofundador y exinversionista, demandó a la compañía alegando que su plan traicionaba la misión fundacional de asegurar que la inteligencia artificial beneficie a toda la humanidad. La demanda sigue su curso y se espera que llegue a juicio en 2026.
Además, organizaciones como Encode.org, los Teamsters de California y varios laureados con el Nobel enviaron cartas a las fiscalías pidiendo bloquear la reestructuración. Los críticos alertaron que la transición ponía en riesgo los activos caritativos de la organización y el acceso democrático a una tecnología que cada vez más define el futuro de la humanidad.
En un memo a los empleados, el CEO Sam Altman reconoció que el modelo de ganancias limitadas tenía sentido en un escenario con una sola iniciativa de AGI dominante, pero que el panorama actual de múltiples actores requiere mayor flexibilidad financiera. Altman, quien curiosamente no posee acciones en OpenAI, afirmó que la compañía podría necesitar “trillones de dólares” para cumplir con su objetivo de hacer accesible la AGI a escala global.
También te puede interesar:ChatGPT Amplía el Modo de Voz Avanzada para Usuarios Gratuitos de Europa“Queremos construir una inteligencia artificial que sea como un cerebro para el mundo y que esté al alcance de todos”, escribió Altman. “Creemos en una IA democrática, aunque eso signifique aceptar diferentes marcos morales”.
Pese al tono optimista del mensaje, persisten las dudas sobre el equilibrio entre la responsabilidad ética y los intereses económicos. El caso de OpenAI reabre el debate sobre si es viable desarrollar tecnologías de impacto global desde estructuras con incentivos de lucro sin perder de vista su propósito fundacional.
En este contexto, la compañía también ha reforzado sus lazos con actores estratégicos, como se evidencia en su reciente iniciativa conjunta con laboratorios nacionales estadounidenses para fortalecer el liderazgo en IA del país, detallada en este comunicado oficial.
Me dedico al SEO y la monetización con proyectos propios desde 2019. Un friki de las nuevas tecnologías desde que tengo uso de razón.
Estoy loco por la Inteligencia Artificial y la automatización.