Imagínate que grabas un vídeo perfecto, pero al escucharlo solo oyes tráfico, gente hablando detrás o el perro del vecino ladrando sin parar. Te ha pasado alguna vez, ¿verdad? Pues justo aquí entra en juego SAM Audio, la nueva IA de Meta que promete hacerte la vida mucho más fácil cuando trabajas con sonido en tus grabaciones.
Con esta herramienta vas a poder subir un audio o un vídeo, marcar qué quieres escuchar y qué quieres quitar, y dejar que la inteligencia artificial haga la parte más pesada de la edición. Lo interesante no es solo lo que hace, sino cómo lo hace: con texto sencillo, clics sobre el vídeo y una interfaz pensada para que cualquiera pueda manejarla sin saber de mezclar ni de plugins raros.
A lo largo del artículo vas a ver para qué sirve SAM Audio, cómo entrar en la web de Meta para probarla gratis, qué tipo de prompts funcionan mejor y qué usos prácticos tienes si grabas música, podcasts, clases, vídeos para redes o proyectos más técnicos como investigación o materiales accesibles.
SAM Audio es una plataforma online gratuita creada por Meta que usa inteligencia artificial para segmentar y manipular fuentes de sonido en cualquier grabación. En la práctica, significa que subes un archivo y vas a poder separar la voz, la guitarra, los aplausos o el ruido de tráfico casi al instante.

La idea de Meta es que no necesites ser técnico de sonido para conseguir resultados muy cercanos a una edición profesional. La IA se encarga de detectar qué hay en el audio y tú solo le indicas, con texto o con clics, qué sonido quieres aislar, eliminar o resaltar en tu mezcla final.
Según Meta y el propio Mark Zuckerberg, este modelo puede cambiar cómo se edita audio y vídeo en sectores tan distintos como música, podcasts, televisión, cine, investigación científica y accesibilidad. Todo desde el navegador y sin instalar nada en tu ordenador.
Si te preguntas cómo consigue SAM Audio separar una guitarra del resto de la banda o quitar el ruido de un estadio, la clave está en los modelos de IA de segmentación de Meta. El sistema “escucha” el archivo, identifica fuentes de audio y las separa en capas para que tú las controles por separado.
Tú no ves toda esta parte técnica. Lo único que notas como usuario es que puedes pedirle a la IA lo que quieres con indicaciones sencillas y, tras unos segundos de procesamiento, el resultado llega listo para descargar. Es un enfoque pensado para que tanto un profesional como un principiante obtengan algo útil en poco tiempo.
Una de las funciones más potentes de SAM Audio es el uso de prompts de texto. Básicamente le escribes qué sonido te interesa y el sistema lo busca dentro del archivo, lo separa y te deja decidir qué hacer con él. Todo en lenguaje sencillo, sin tener que tocar ecualizadores ni compresores.
Por ejemplo, puedes introducir descripciones como “ladrido de perro”, “voz cantando”, “aplausos” o “guitarra eléctrica”. La IA analiza la grabación y te devuelve ese sonido aislado para que lo conserves, lo quites por completo o lo hagas más protagonista frente al resto.
Lo más práctico llega en situaciones reales: quitar el ruido de tráfico en una entrevista en la calle, eliminar un perro ladrando en un podcast grabado en casa o suavizar un murmullo constante de público en una charla grabada con un solo micrófono. Con unas pocas palabras vas a poder limpiar una toma que, de otra forma, sería casi imposible salvar.
Cuando trabajas con vídeo, SAM Audio añade otra capa interesante: las indicaciones visuales. En lugar de solo escribir un prompt, puedes hacer clic sobre una persona u objeto en la imagen para indicarle al sistema qué fuente de sonido te interesa.
Piensa, por ejemplo, en una banda tocando en directo. Puedes pulsar sobre la batería o sobre el guitarrista para que la IA busque el audio asociado a ese elemento concreto y lo separe del resto. Así vas a poder bajar el ruido general del escenario y centrarte en un instrumento sin necesidad de tener cada pista grabada por separado.
Otro caso típico es una entrevista dentro de un estadio o un evento con mucho ruido ambiental. Con SAM Audio puedes marcar al orador y pedir que su voz quede clara, mientras el ambiente baja de volumen o se atenúa. Lo mismo pasa en un evento con público: el sistema permite extraer solo la voz de un presentador y filtrar los gritos y conversaciones de fondo.
La gracia de SAM Audio está en que no es una herramienta pensada para un único tipo de usuario. Sirve igual para quien produce canciones, quien graba un podcast desde su salón o quien prepara contenido educativo o científico y necesita audio limpio sin montar un estudio profesional.

En el campo musical, SAM Audio te permite subir un tema y aislar instrumentos concretos, como la guitarra, el bajo o la voz principal. Esto viene genial para practicar, hacer versiones, analizar arreglos o crear mezclas alternativas sin tener acceso a las pistas originales de estudio.
Por ejemplo, puedes separar el instrumento de un músico concreto dentro de una banda con varios integrantes, escuchar solo ese fragmento y luego volver a integrarlo al resto con otro equilibrio de volumen. También puedes hacer lo contrario: eliminar un instrumento para dejar espacio a tu propia interpretación mientras tocas encima.
Si grabas podcasts o contenido para redes, seguramente luchas con ruidos de fondo constantes: tráfico, vecinos, golpes, ventiladores o incluso mascotas. Con SAM Audio vas a poder localizar estos sonidos y limpiarlos sin meterte en una sesión de edición eterna.
Un uso típico es decirle que elimine el “ladrido de perro” que se cuela a lo largo de todo un episodio, que reduzca el ruido del tráfico en una grabación al aire libre o que suavice el murmullo de una cafetería donde grabaste una charla improvisada. La herramienta se queda con la voz principal y deja el entorno mucho más controlado.
También puedes usarla para resaltar la voz del presentador en eventos con público, webinars o directos en los que el sonido del entorno se te ha ido un poco de las manos. Gracias a la IA vas a poder recuperar claridad sin repetir la grabación desde cero.
En producciones de televisión y cine, el trabajo de posproducción de audio suele llevar muchas horas. Ahí SAM Audio encaja como una ayuda extra, sobre todo en las primeras pasadas de limpieza de sonido. La IA prepara el terreno y luego un técnico puede terminar de ajustar los detalles más finos.
Por ejemplo, permite silenciar el ruido ambiental de un estadio para destacar el audio de una entrevista a pie de campo, limpiar diálogos grabados en exteriores con mucho tráfico o ajustar ambientes complejos sin necesidad de repetir rodajes. La idea es ahorrar tiempo y centrar a los equipos en las decisiones creativas, en lugar de perderse en tareas manuales repetitivas.
Más allá del contenido comercial, SAM Audio tiene mucho sentido en contextos de investigación y educación. Por ejemplo, en estudios donde se analizan patrones de sonido, conversaciones o señales ambientales, la IA puede ayudar a separar fuentes concretas y hacer más fácil el análisis posterior.
En materiales de enseñanza o accesibilidad, la herramienta sirve para hacer más clara la voz principal frente al resto de la mezcla. Si creas vídeos formativos, cursos online o recursos para personas con dificultades auditivas, puedes reforzar la inteligibilidad de la narración, reducir ruidos de fondo y adaptar el audio para que se entienda mejor en distintas situaciones.
Si ya tienes claro que quieres probar SAM Audio, el proceso de uso es bastante directo. Solo necesitas un ordenador con conexión a internet y el archivo que quieres editar. El resto lo haces desde el navegador, sin instalar programas extra ni pagar licencias.

Para empezar, entra con tu ordenador en la página de demos de Meta dedicada a los modelos SAM, concretamente en la sección de segmentación de audio. Ahí es donde encontrarás la opción específica de aislar sonidos en tus grabaciones con la nueva IA.
Una vez dentro de la web, verás un botón llamado “Try it”. Haz clic y, en el menú que se abre, elige la función “Isolate Audio”. Esa es la herramienta que te permite trabajar directamente con tus archivos de audio y vídeo usando el modelo SAM Audio.
En cuanto accedes a la sección de “Isolate Audio”, ya puedes empezar a trabajar con tus grabaciones. El flujo de uso está pensado para que sigas siempre la misma secuencia, tanto si quieres limpiar ruido como si quieres hacer ediciones creativas.
El proceso puede repetirse varias veces, cambiando el prompt o la selección para tratar distintas fuentes de sonido en la misma grabación. Así vas afinando el resultado hasta dejar el audio como te interesa.
Si vienes de programas clásicos de edición, lo que llama la atención de SAM Audio es la combinación de simplicidad y resultados avanzados. Normalmente, separar una voz del resto o quitar un ruido molesto exigía tiempo, experiencia y muchas pruebas. Aquí la IA asume gran parte de ese trabajo repetitivo.
Gracias al uso de instrucciones sencillas y automatizadas, vas a poder ahorrar minutos e incluso horas editando podcasts, vídeos o maquetas musicales. La calidad del resultado se acerca a lo que esperarías de un flujo de trabajo profesional, pero sin necesidad de aprender herramientas complejas ni ajustar decenas de parámetros técnicos.
No sustituye del todo a un ingeniero de sonido cuando buscas un acabado muy fino, pero sí te deja una base muy limpia con un esfuerzo mínimo. Para muchos creadores, esto ya marca la diferencia entre publicar algo aceptable o abandonar una grabación por problemas de ruido.
Una de las grandes bazas de SAM Audio es que la curva de aprendizaje es muy baja. La plataforma está pensada tanto para creadores profesionales como para personas que nunca han abierto un editor de audio, y aun así necesitan limpiar o ajustar sus grabaciones para que suenen mejor.
Si trabajas en música, cine, televisión, podcasts o marketing de contenidos, esta IA puede convertirse en una herramienta diaria para aislar sonidos, filtrar ruido y probar ideas creativas con rapidez. Si, en cambio, solo grabas vídeos caseros, clases online o reuniones, te ayudará a que todo suene más comprensible sin invertir horas en aprender un software complejo.
Meta, de hecho, ya está usando SAM Audio internamente para construir la siguiente generación de herramientas creativas de medios. Eso indica que la propia compañía ve mucho recorrido en este enfoque de segmentación automática del sonido y en la mezcla de texto, clics e inteligencia artificial en el mismo flujo de trabajo.
Aunque la estrella del momento es SAM Audio, la misma plataforma de demos de Meta integra otras funciones relacionadas con imagen y 3D, todas basadas en la familia de modelos SAM. Así puedes trabajar tu contenido multimedia completo desde una única página, sin saltar entre aplicaciones distintas.
Entre estas opciones se encuentran herramientas como “Create video cutouts”, que genera recortes automáticos de vídeo usando SAM 3, y “Create image cutouts”, orientada a extraer objetos en imágenes estáticas con la misma tecnología. Ambas están pensadas para agilizar tareas típicas de edición visual.
En el ámbito tridimensional, la web incluye funciones como “Create 3D scenes” con SAM 3D, que ayuda a crear escenas 3D a partir de contenido de entrada, y “Create 3D bodies”, centrada en la generación de modelos tridimensionales de cuerpos humanos. Todo ello convierte la plataforma en un pequeño centro creativo donde combinas audio, vídeo, imagen y 3D con distintas herramientas de IA.
Al final, SAM Audio se presenta como una solución muy accesible para aislar, eliminar o resaltar sonidos específicos en tus grabaciones usando solo texto y clics. Gracias a la inteligencia artificial de Meta, vas a poder limpiar podcasts con ruido de tráfico, destacar voces en vídeos, separar instrumentos en canciones o adaptar materiales para que sean más claros y accesibles, todo desde el navegador y sin experiencia previa en edición de audio.
Me dedico al SEO y la monetización con proyectos propios desde 2019. Un friki de las nuevas tecnologías desde que tengo uso de razón.
Estoy loco por la Inteligencia Artificial y la automatización.